Viajar a Bucarest era algo, hasta hace no demasiado tiempo, reservado a quienes buscaban nuevas experiencias dentro del viejo continente. Y es que, sinceramente, era una de las capitales más desconocidas de Europa. Sin embargo, hoy en día, supone prácticamente una visita indispensable para cualquier viajero que se precie. Basta con mencionar que, históricamente, ha sido conocida como "la pequeña París del este".
Quienes toman un vuelo a Bucarest se encuentran, de golpe, con una ciudad que fusiona a la perfección su rica historia y su tradición con la modernidad propia del siglo XXI. No hay que olvidar que la ciudad fue parcialmente destruida y reconstruida, lo que propicia que su mezcla arquitectónica suponga toda una delicia. Sin duda, un lugar que debes visitar, al menos, una vez en la vida.
Seguro que, si ya has decidido reservar un vuelo de Madrid a Bucarest, te estarás preguntando cuál es la mejor época para viajar a esta urbe. Lo cierto es que es algo totalmente normal, ya que el clima puede afectar de manera significativa a la forma en la que vivas tus ansiadas vacaciones anuales.
Debes tener en cuenta, a la hora de decidir cuándo viajar a Bucarest, que se trata de una ciudad de extremos en referencia a su clima. Estos se observan, sobre todo, durante el verano y el invierno, estaciones en las cuales las temperaturas sobrepasan los treinta grados o descienden con creces por debajo de cero, respectivamente.
Teniendo en cuenta este factor, si quieres disfrutar de unas temperaturas agradables que te permitan vivir a fondo la ciudad en todo su esplendor, trata de viajar durante los meses de abril o mayo. Y, si tienes que elegir entre verano o invierno, mejor en época estival. Aunque haga mucho calor, no te costará tanto moverte de un sitio a otro. En cualquier caso, la ciudad mantiene su belleza durante todo el año.
¿Todavía buscas razones para visitar Bucarest? Pues, si es así, aquí nos hemos propuesto darte unas cuantas. Toma nota:
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Ahora sí, ha llegado el momento de abordar qué hacer en Bucarest durante una estancia inolvidable. Presta atención puesto que, gracias a lo que a continuación procedemos a explicarte, no te costará nada diseñar tu itinerario en Bucarest:
Existen otros lugares recónditos que descubrir en Bucarest, pero aquí no nos cabían todos. ¡Te animamos a que los descubras por ti mismo!
Afortunadamente para el viajero, la capital de Rumanía es una ciudad que resulta bastante económica. Así que, sin hacer grandes dispendios económicos, no tendrás problemas a la hora de comer en Bucarest. En concreto, su gastronomía, aunque desconocida para muchos, es muy variada y presenta influencias propias de Alemania, Serbia y Turquía.
No debes perder la oportunidad de probar las ciorbas, unas sopas elaboradas a partir de productos de la tierra de manera muy especial, así como los platos de carne y pescado que son aderezados de forma particular mediante el uso de hierbas aromáticas. Las mamaliga también merecen figurar en esta selección.
Respecto a las bebidas, en Bucarest se producen excelentes vinos tintos y cervezas de todas las clases. Así que, cuando estés allí, no dudes en probar todas las que puedas, aunque siempre con moderación. La belleza de la ciudad requiere que estés lúcido en todo momento.